JBL Stage1 601C 6.5" Componentes 2 Vías para Coche

Siente la potencia y claridad del auténtico sonido JBL en cada kilómetro, con bajos firmes, medios equilibrados y agudos brillantes que transforman tu experiencia de conducción.

• Marca: JBL

• Modelo: Stage1 601C

• Tipo: Sistema de altavoces de componentes de 2 vías para coche

• Configuración:

  • 2 woofers de 16,5 cm (166 mm)

  • 2 tweeters de 58,7 mm

  • Crossover incluido para una división precisa de frecuencias

• Potencia máxima: 200 W

• Potencia RMS: aprox. 50–55 W

• Respuesta de frecuencia: hasta 20.000 Hz

• Impedancia: 4 ohmios (compatible con la mayoría de sistemas de coche)

• Sensibilidad: óptima para funcionar con unidades principales o amplificadores externos

• Material del woofer: polipropileno, ligero y resistente, para graves y medios limpios

• Material del tweeter: cúpula equilibrada PEI/Mylar para agudos suaves y definidos

• Diseño: estética JBL Stage, reconocible y moderna

• Montaje: empotrado, compatible con la mayoría de vehículos que usan altavoces de 16–17 cm

• Tecnología de conectividad: cableada (coaxial en conexiones internas)

• Modo de salida de audio: estéreo

• Durabilidad extrema: sometidos a pruebas ambientales severas por Harman Kardon (congelado, horneado, vibración, radiación UV y funcionamiento continuo a máxima potencia durante días)

• Compatibilidad: ajustados para encajar en la mayoría de modelos de coche con las mismas dimensiones, ofreciendo un ajuste fácil y seguro

• Rendimiento JBL: sonido fiel, bajos sólidos, medios nítidos y agudos brillantes

• Enfoque en el valor: calidad de construcción y sonido legendarios a un precio muy competitivo

• Fiabilidad garantizada: pruebas de resistencia que superan los estándares habituales del sector

Cuando Laura encendió por primera vez su nueva instalación con los JBL Stage1 601C, no esperaba que un trayecto al trabajo pudiera sentirse como un concierto privado. El bajo marcaba el ritmo, los agudos eran tan claros que parecía que el cantante estuviese sentado a su lado, y cada detalle de su música favorita cobraba vida. Desde entonces, conducir ya no era solo moverse de un punto a otro: era su momento diario para desconectar, cantar a pleno pulmón y sentir que la carretera le pertenecía.